En ningún caso la rotación de personal en una empresa puede suponer una buena noticia. Bien sea por decisión de los empleados, que prefieren marcharse que continuar en la compañía, o bien porque es la propia empresa la que despide a sus trabajadores con demasiada frecuencia, la rotación de personal es un signo de que algo no va bien.
Por qué es importante la rotación de personal en la empresa
Hay que tener en cuenta que la rotación excesiva de personal provoca importantes costes para la empresa, que tiene que invertir recursos en buscar y formar a un nuevo profesional que sustituya al anterior. Por otro lado, tampoco es sencillo para un trabajador abandonar un lugar en el que ya está acostumbrado a trabajar y en el que probablemente haya hecho buenos amigos y compañeros.
Entonces, ¿por qué puede tener lugar esta rotación de personal? ¿Cómo influyen estas causas en la gestión del talento humano de una empresa? Estas son las principales causas:
- Salarios demasiado bajos: es muy sencillo que un empleado con un sueldo demasiado bajo reciba ofertas más tentadoras, a las que muy probablemente dirá que sí.
- Un mal clima laboral: es el conocido como salario emocional. Si un empleado no está tranquilo y feliz en su puesto de trabajo, puede plantearse más fácilmente abandonarlo.
- Un lugar de trabajo incómodo o insano: las condiciones físicas del entorno de trabajo también pueden influir en este tipo de decisiones.
- Trabajos demasiado duros: excesivas presiones, mucho esfuerzo físico o jefes muy exigentes pueden provocar que la rotación de de personal sea más alta de lo habitual.
Y estas son las peores consecuencias de esa rotación de personal:
- Invertir en la selección y formación de un nuevo candidato.
- Bajada de productividad hasta que se cubre el puesto.
- Personal implicado en ayudar al nuevo trabajador, descuidando sus propias funciones.
- Fuga de conocimiento y talento, la que se produce cuando la empresa pierde a un empleado que conocía perfectamente sus tareas y el funcionamiento de la empresa.