Redactar y enviar un email de despedida de trabajo es más que recomendable, por diversos motivos. En primer lugar, si lo utilizamos para despedirnos de nuestros compañeros, dejaremos en ellos un buen sabor de boca y será un punto de partida idóneo para mantener el contacto profesional.
La vida es muy larga y el mundo muy pequeño: no sabemos cuándo y dónde puede darse la circunstancia de volver a coincidir con antiguos compañeros de trabajo. Por este motivo, y siempre que no hayan sido las discusiones o los problemas personales con alguno de ellos la razón por la que dejas la empresa, lo mejor es terminar la relación laboral de la mejor forma posible.
Y lo mismo ocurre con los que han sido tus jefes, los responsables de tu departamento o incluso el o la gerente de la empresa. Es probable que no siempre hayas estado de acuerdo con las decisiones que han tomado, incluso que alguna de ellas te haya molestado, pero debes tratar de hacer un esfuerzo para que la despedida sea lo más cordial posible. Para conseguirlo, redactar un buen email de despedida puede ser la mejor solución. Si quieres saber cómo hacerlo, toma nota de los siguientes consejos:
Utiliza un tono positivo
Es una de las bases o técnicas de la buena comunicación, la que mejor resultados ofrece: utilizar verbos en positivo, no en negativo. Por ejemplo: di «comienza una nueva aventura para mí», en lugar «termina una etapa de mi vida». O «siempre recordaré mi estancia en la empresa», en lugar de «echaré de menos formar parte de esta empresa». ¿Notas la diferencia?
Asimismo, y mucho más importante, no utilices el email de despedida para tratar temas negativos que te hayas dejado en el tintero, ni para recriminarle nada a nadie. Es el momento y el soporte ideal para hablar solo de aspectos positivas.
Habla desde una perspectiva personal
Un email de despedida será mucho más efectivo si utilizas un tono personal y no lo redactas como si fuera un email tipo. Para conseguirlo, puedes incluso nombrar a las personas que más te han ayudado o que más importantes han sido para ti, y destacar lo bien que lo has pasado y lo que has aprendido en la empresa.
Comenta tu experiencia
En esta misma línea, aprovecha la ocasión para resumir y destacar todo lo que el trabajo te ha aportado a nivel personal y profesional. Es importante que tus compañeros y tus jefes entiendan que, aunque te vas de la empresa, has aprovechado al máximo tu estancia en ella y no te arrepientes para nada del tiempo compartido con ellos.
Obviamente, los motivos del cese de la actividad influirán mucho en este aspecto, pero siempre deberás ser lo más positivo posible.
Da las gracias
Y, siguiendo con el mismo tono positivo, no te olvides de dar las gracias. A tus compañeros, por su ayuda, por su colaboración y por los buenos ratos compartidos. Y a tus jefes, por darte la oportunidad de trabajar con ellos y por permitirte ampliar tu experiencia profesional y aprender en la empresa.
Despídete con los mejores deseos
No olvides tampoco dedicar una parte de tu email de despedida (normalmente el final del mismo) a desearle a todos lo mejor en el futuro. Sobre todo, indica que te gustaría que les fuese bien, tanto a nivel personal como profesional, y que esperas volver a coincidir con ellos en algún momento.
Siguiendo estos sencillos consejos, lograrás redactar un email de despedida que hará que todos te recuerden con cariño y de forma positiva. Además, un email de este tipo te ayudará en caso de tener que retomar la relación con antiguos compañeros en el futuro.