Una baja laboral consiste en un periodo de tiempo determinado durante el cual un trabajador no puede acudir a su puesto de trabajo por cuestiones de salud. El médico, que es quien certifica la enfermedad, indica así que el empleado necesita pasar unos días sin trabajar para recuperarse de sus dolencias, que pueden ser de cualquier índole. ¿Pero cuáles son las causas de baja laboral más frecuentes? ¿Cuántos tipos de bajas laborales existen?
Tipos de baja laboral
Aunque cada caso es un mundo, en concreto existen dos tipos de baja laboral: por contingencias comunes y por contingencias profesionales. Es importante conocer los detalles y diferencias de cada una, así como entender el funcionamiento de la prestación por incapacidad temporal, que es el importe que el trabajador recibe cuando está de baja. Dado que ya no realiza sus funciones habituales, deja de recibir su salario y, en compensación, cobra estando de baja laboral con esta prestación.
En ambos casos, el médico emite un parte de baja que es el que servirá para justificar la enfermedad. Si esta se prolonga, se tendrán que ir renovando esos partes hasta que el trabajador esté recuperado. En ese momento, el médico emitirá un parte de alta. Ambos documentos deben ser enviados a la empresa por parte del empleado, para que esta tenga constancia de su situación.
Baja laboral por contingencias comunes
Básicamente, se considera baja laboral por contingencias comunes cuando el trabajador sufre una enfermedad o un accidente que no tienen nada que ver con el desarrollo de su actividad profesional. Aunque las causas de la baja laboral no están relacionadas con el desempeño laboral del empleado, sí que le impiden trabajar como lo hacía de forma habitual. Algunos ejemplos de causa de baja por contingencias comunes serían: estar enfermo de gripe, tener gastroenteritis o sufrir un esguince.
Baja laboral por contingencias profesionales
Aunque puede ocurrir en cualquier situación y en cualquier tipo de trabajo, existen actividades profesionales que son especialmente propensas a que los empleados que las desarrollan puedan sufrir accidentes de trabajo mientras lo hacen. Es en estos casos cuando hablamos de baja laboral por contingencias comunes, causada por accidente de trabajo. También se incluye dentro de este tipo de baja laboral la posibilidad de que el trabajador sufra un accidente de camino al trabajo, o de vuelta a casa desde el mismo.
Otro caso distinto sería que el empleado contrajera una enfermedad relacionada de alguna forma con su actividad en la empresa. Esta sería calificada como enfermedad profesional si cumple una serie de requisitos, como que la enfermedad tenga su origen en el trabajo realizado y que esté incluida en el cuadro de enfermedades profesionales, aprobado por ley.
En función del origen de la enfermedad o de la causa y el lugar del accidente, el trabajador se adscribiría a un tipo de baja laboral o a otra, con las diferencias en cuanto a condiciones y prestaciones que ello conlleva.
Algunos detalles sobre la prestación por incapacidad temporal
Muchas veces lo ignoramos, pero es importante recordar que tanto empleado como empresa dedican una parte de su nómina y recursos, respectivamente, a cubrir esas situaciones en las que el trabajador está de baja. Se trata de un derecho del trabajador que ofrece protección y seguridad, y que se refleja en la nómina de cada mes.
También es conveniente señalar que la empresa contribuye en mayor medida a esta cobertura, y que el importe que se tendrá que abonar en este concepto vendrá condicionado, entre otros aspectos, por el salario base, los pluses y las pagas extra, que son los que conforman la base de cotización.