Aunque el teletrabajo ofrece múltiples ventajas (mayor conciliación laboral/familiar, flexibilidad horaria, ahorro en los costes de desplazamiento…) lo cierto es que trabajar a distancia no es para todo el mundo. Por no hablar de que no todas las empresas que han implantado el teletrabajo cuentan con una política de trabajo en remoto en condiciones. Así pues, si te encuentras en un proceso de selección para trabajar a distancia, hay una serie de preguntas que debes hacerte antes de tomar una decisión. Si la empresa tiene una política de teletrabajo definida o si tendrás que ir a la oficina alguna vez, son algunas de las preguntas que exploraremos a lo largo del artículo. Sigue leyendo nuestros consejos para enterarte de todo.
Preguntas que debes hacerte antes de aceptar un trabajo en modalidad de teletrabajo
Antes de aceptar una oferta de empleo para un puesto remoto plantéate las siguientes cuestiones
¿La empresa tiene una política de trabajo en remoto o simplemente «está probando» esta modalidad?
Si los recruiters valoran si somos los candidatos idóneos para sus puestos de trabajo… ¿Por qué nosotros no hacemos lo mismo con la empresa en sí?. No solo debemos hacer ciertas preguntas para saber si encajamos en la cultura corporativa de la empresa; también averiguar hasta qué punto la compañía tiene una política clara y efectiva sobre el trabajo en remoto. Si tú quieres teletrabajar y te das cuenta de que la política de teletrabajo de la empresa hace aguas o directamente brilla por su ausencia, entonces quizá no te interese dar un paso más allá.
¿La empresa apuesta por el teletrabajo al 100% o tengo que ir a la oficina en algún momento?
Tanto si el puesto de trabajo es 100% en remoto como si tienes que ir un par de días a la oficina, el recruiter debe ser capaz de contestar esta pregunta con seguridad. Si necesita consultarlo o duda a la hora de dar una respuesta, es muy posible que ni la propia empresa lo tenga claro. Si a ti te da lo mismo combinar el trabajo remoto con el presencial, podrías dejarlo pasar, pero si estás optando a un puesto 100% en remoto esta inseguridad no te conviene.
¿Cómo llevo la soledad? ¿Prefiero trabajar en casa o soy «carne de oficina»?
Evidentemente, no todas las preguntas que debemos hacer hacen referencia única y exclusivamente a la empresa. Seamos sinceros: trabajar desde casa todos los días es algo que puede mermar nuestro ánimo y nuestra capacidad de socialización, por muchas videollamadas y meetings que hagamos a la semana. Si cuidar de nuestra salud mental es imprescindible en todos los niveles, tanto o más ocurre cuando estamos teletrabajando. La sensación de aislamiento, el no estar cara a cara con nuestros compañeros de trabajo, estar gran parte del día encerrados en casa… Son cosas muy positivas para algunos, pero todo lo contrario para otros. Valora si te compensa.
¿Mi casa o mi espacio de trabajo está habilitado para trabajar en remoto?
Otra pregunta que debes hacerte como trabajador. Muchas personas tienen la suerte de tener un Home Office o un espacio de trabajo en su propia casa para desempeñar su puesto (además de un buen equipo y una buena conexión a Internet, por supuesto). Si no tienes posibilidad de trabajar tranquilamente en tu casa (bien porque compartes vivienda con familiares, amigos o compañeros de piso) o directamente no tienes un espacio reservado para tal función (como puede ser un coworking) deberías plantearte si el teletrabajo es la mejor fórmula para ti.