Aunque muchas veces se suelen confundir ambos términos, el grupo de cotización y la categoría profesional son dos conceptos diferentes. De hecho, la categoría profesional como tal ha dejado de existir, dando paso desde el año 2012 a lo que hoy conocemos como grupo de cotización o grupo profesional. Si quieres conocer qué representa cada término y qué diferencias existen entre la categoría profesional y el grupo de cotización, continúa leyendo.
¿Qué era una categoría profesional?
Las categorías profesionales dividían a los trabajadores en función de varias de sus características, como pueden ser la titulación, los idiomas o sus aptitudes. Como ves, se trataba únicamente de cuestiones relacionadas con el trabajador, pues este antiguo concepto no tenía en cuenta el tipo de trabajo a desarrollar.
¿Qué es un grupo de cotización?
En cambio, el nuevo concepto va más allá. Cuando hablamos de grupo de cotización, o grupo profesional, tenemos en cuenta muchos más factores, especialmente los relacionados con el tipo de trabajo que realiza el empleado. Así, se valoran las tareas concretas que se llevan a cabo en el puesto de trabajo, así como los conocimientos que se necesitan aplicar o las responsabilidades que se deben asumir.
Los grupos de cotización se conciben a efectos de la base de cotización a la Seguridad Social. Se trata de una serie de códigos a través de los cuales se clasifica a los profesionales. Así, a cada trabajador se asignará una cotización diferente en función de su trabajo, no de su preparación. Para que te hagas una idea, si un ingeniero trabajaba trabaja de recepcionista, debía cotizar como ingeniero. Ahora, en cambio, cotizaría como recepcionista.
El grupo de cotización determinará, entre otras cuestiones, el salario mínimo interprofesional del trabajador. Se trata de un sistema más real y concreto, ajustado a las actividades reales de cada puesto de trabajo.