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Una pregunta muy recurrente cuando acudes a una entrevista para un nuevo puesto es ¿Por qué dejaste tu anterior empleo? A la persona que debe llevar a cabo la entrevista de trabajo le interesa conocer mejor al posible candidato, sus motivaciones y aspiraciones, pero también su pasado laboral. ¿Por qué le interesa este tema?

Las circunstancias profesionales de una persona son muy diversas y pueden estar motivadas por distintos hechos, positivos y negativos, que configuran su carrera profesional. No es lo mismo irse de un puesto buscando una mejora laboral que hacerlo porque te han despedido. Y dentro de estos despidos, también existen distintos niveles que pueden ser más o menos positivos a la hora de plantearlos en una entrevista de trabajo.

Es posible que te despidieran de tu anterior puesto y ahora debas enfrentarte a comenzar de nuevo en el mundo de las entrevistas de trabajo. Sientes que has perdido la técnica y te da pánico que te hagan la fatídica preguntar y no saber qué responder. Lo más importante: no mientas ni inventes excusas. Vamos a explicarte cómo puedes revertir el objetivo de esta pregunta y conseguir que te beneficie.

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Consejos para hablar de un anterior despido en la entrevista

Admitir que te despidieron de tu anterior empleo puede darte miedo, pero ten en cuenta que influyen muchas variables en cada caso. Las empresas deben hacer despidos atendiendo a necesidades económicas o productivas y esto no implica que dicho profesional no realizara bien su trabajo. Pero puede que tu caso sea diferente y tu despido se debiera a desavenencias con la directiva. ¿Cómo puedes explicarlo? Lo importante es que no te castigues eternamente por los errores o fallos del pasado.

El camino laboral está lleno de subidas y bajadas, encontrarás personas con las que conectes muy bien y otras con las que no logres encajar. En tu motivación personal, en tu capacidad de hacer autocrítica y seguir creciendo, encontrarás las claves para mejorar.

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Responde con sinceridad, pero con criterio

Es importante decir la verdad, pero no es necesario entrar en detalles innecesarios que te hagan perder puntos delante de la persona que te entrevista.

No critiques a tu anterior empresa

La corrección, el respeto y las buenas maneras son tu mejor carta de presentación. Incluso en aquellos casos en los que se hayan portado mal contigo, no es momento para la queja. Piensa que si empiezas hablando mal de tu anterior puesto (por mucho que tengas motivos) estás dando la imagen de una persona rencorosa y poco profesional.

No escondas tus defectos, pero potencia tus habilidades

Si el motivo de tu despido estaba relacionado con el desarrollo de tu actividad no niegues que hubo cosas que no hiciste bien. Pero destaca que desde entonces te has formado, has intentado avanzar y seguir creciendo para convertirte en mejor profesional en tu área.

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No uses la carta de víctima

Es importante que demuestres que sabes responsabilizarte de tus actos. En la entrevista no quieren escuchar quejas, esperan de ti soluciones y proactividad y debes demostrarles que eres capaz de hacerlo.

Nuevos lugares, nuevas oportunidades

Cuando pasas por un ambiente de trabajo tóxico en el que no te valoran, tiendes a creer que te encontrarás nuevos lugares así y el miedo te impide avanzar. Desecha esos pensamientos negativos. Los prejuicios solo te servirán para cerrarte e impedirte disfrutar de nuevas oportunidades en un lugar que aún no conoces y en el que pueden esperarte personas maravillosas.

La entrevista de trabajo debe ser tu oportunidad para destacar como profesional y demostrar porque deberías estar en esa empresa. Con una buena actitud y honestidad conseguirás abrir las puertas de un nuevo proyecto y dejar atrás los problemas profesionales del pasado.

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