Existen muchos sectores en los que el trabajar en el turno de noche resulta necesario para su correcto funcionamiento. Por ejemplo, las fuerzas y cuerpos de seguridad o los bomberos, los profesionales sanitarios, los transportistas, los operarios de mantenimiento y de fábricas 24 horas como las de automóviles, las estaciones de servicio, las farmacias, las tiendas de alimentación, los locales de ocio, etc. Esta situación tiende a ser cada día más frecuente, ya sea porque las empresas no cesan su actividad por la demanda de los usuarios o para amortizar el alto coste de la inversión que han tenido que realizar, o por el incremento del comercio mundial y la globalización económica, que implica que cuando en un país se hace de noche, comienza la jornada laboral en otros lugares del planeta. ¿Quieres conocer todas las claves para adaptarse a un trabajo nocturno? Entonces no dudes en seguir leyendo.
Consejos para sobrevivir a un trabajo nocturno
Por eso, si tú eres una de las muchas personas que trabajan en turno de noche, sabrás los inconvenientes que este horario laboral conlleva, al alterar los ritmos biológicos naturales y tu reloj interno, ya que el cuerpo está diseñado para dormir de noche, lo que puede acarrear algunos riesgos para tu salud y bienestar (como insomnio, cansancio mental, aumento de peso e irritabilidad).
Por eso, para combatir los efectos negativos del turno de noche y ayudar a tu adaptación a este horario, te explicamos algunos consejos fáciles y que han probado su eficacia para mantenerte saludable a pesar de tu horario.
1. Duerme cuanto antes
Lo primero que debes procurar es irte a la cama nada más salir del trabajo. No hagas recados, ni la compra, ni quedes con amigos o familiares, ya que esto te despertará más, causando insomnio. Al revés, organiza tu jornada para hacer todo lo que necesitas antes de ir a trabajar, y siempre tras haber dormido suficiente.
2. Protégete del sol
Procura evitar también estar al aire libre, sobre todo si ya brilla el sol, porque te pondrás más alerta y te costará más dormir, por lo que es bueno utilizar gafas de sol cuando salgas de trabajar. Cuando ya estés en casa, trata de mantenerla lo más oscura posible, cerrando las cortinas y evitando en lo posible la luz brillante del sol.
3. Vigila tu alimentación e hidrátate
También debes adaptar tu rutina alimentaria. No comas nada antes de que se acabe tu jornada nocturna, ya que tendrás dificultades para la digestión y ello puede causarte molestias y hasta un aumento de peso. Y aliméntate bien consumiendo carbohidratos (pasta, cereales, etc.), para obtener energía durante las horas de trabajo nocturno, a la vez que evitas comidas azucaradas y procesadas y la comida rápida, sobre todo. Para evitar esto, mantén a tu alcance frutas y frutos secos y prepara tus comidas con anticipación.
En el portal Biotrendies.com encontrarás información muy útil sobre las comidas y los hábitos alimenticios más saludables para tu tipo de jornada laboral. ¡Descúbrelos!
También debes mantener tu hidratación, asegurándote de beber mucha agua durante tu jornada para eliminar toxinas y mantenerte despierto.
Indudablemente, tener que trabajar en horario nocturno puede ser difícil y hacerse muy pesado, ya que dificulta obtener las horas de sueño que necesitas, comer de manera saludable y hasta el poder hacer ejercicio.
4. Procura prescindir de la cafeína
No necesitas cafeína para tu trabajo nocturno. El café puede hacer que sea aún más difícil conciliar el sueño más tarde. Procura hacer ejercicio, tanto durante tu turno (te ayudará a dormir mejor cuando salgas de trabajar) como después de descansar.
5. Evita las pastillas para dormir
Aunque te puedan servir en alguna ocasión, ya que si dependes de ellas tu reloj interno no se ajustará a tu horario. Al contrario, aprende métodos de relajación que te ayuden a desconectar del trabajo antes de meterte en la cama.
Pero hay pequeños trucos y actitudes que te facilitarán la vida si este es tu tipo de jornada de trabajo: trata de incorporar estos consejos infalibles y te sentirás mucho mejor.