Si quieres dejar de ser becario y poder acceder a un contrato laboral en condiciones óptimas, este artículo te interesa. Realizar prácticas en empresas y ser becario es una etapa laboral que muchos jóvenes han de pasar y que puede ser muy beneficiosa para su formación. Sin embargo, nadie quiere ser becario para toda la vida. Nuestros consejos para dejar de ser becario, a continuación.
¿Cómo dejar de ser becario?
El aumento del número de las principales becas para trabajar en España en los últimos años y la precariedad del empleo han derivado en una prolongación de la etapa de becarios para muchos jóvenes. No se trata de una situación deseable pues, una vez que el joven ha terminado sus estudios, es normal que crea llegado el momento de su inserción plena en el mercado laboral.
Así, si quieres dejar de ser becario y pasar a ser empleado, he aquí 7 consejos fundamentales que te ayudarán a hacer realidad tus principales deseos en el ámbito laboral.
1. Mantén una actitud positiva y de colaboración
El becario está completando su formación en una empresa y la mejor actitud para conseguir este objetivo es tener una actitud de colaboración y ayuda en todo momento. Hay que mostrar el interés por lo que te están enseñando, implicarse y tener una buena disponibilidad. Pero ¡ojo! esto no quiere decir dejarse “explotar” o desempeñar tareas que no sean propias de tu función.
Mostrando interés por pertenecer al grupo y a la empresa. Si crees que tienes posibilidades reales de terminar formando parte de la plantilla de la empresa, no basta con que estés interesado sino que debes mostrar ese interés. No busques destacar a título personal, piensa en el equipo, no seas demasiado autosuficiente y trata de adecuar tu comportamiento a la cultura corporativa de la compañía.
2. No tengas miedo a preguntar
El objetivo principal del becario es aprender por lo que no debes tener nunca miedo a preguntar y a mostrar una actitud curiosa hacia todo lo que te rodea. El desconocimiento se comprende en el becario, el desinterés no.
3. Apuesta por la proactividad
Contar con iniciativa es imprescindible para llegar a ser empleado y diferenciarte del resto de candidatos. Si no tienes nada que hacer un determinado día, busca cómo ayudar a los compañeros o encuentra tareas. No dejes de pensar en cómo aprender más y colaborar con el grupo.
4. No subestimes el poder de la puntualidad
La impuntualidad es un defecto que está muy mal considerado en casi cualquier empresa y que es motivo de despido en cualquier proceso de búsqueda de empleo. No sólo debes llegar siempre a tu hora, trata de llegar un poco antes. Aprende a preparar las preguntas de tu entrevista y consigue el empleo que deseas.
5. Trata de ser un jugador de equipo
Este punto enlaza directamente con el punto 2 pues un factor clave para pertenecer al grupo es la capacidad de trabajar en equipo, sin personalismos ni egos. La integración es una de las principales habilidades blandas en el trabajo, es otro aspecto muy valorado en las empresas al contratar a nuevos empleados.
6. Ten en cuenta la humildad
Hay que considerar la beca como una oportunidad y ser agradecido y humilde. Aunque no te guste cómo se te dirigen a ti algunos compañeros debes recordar que acabas de llegar y que tu función es aprender. Puede que sientas que los trabajadores de la empresa te ignoran o no te tratan como un igual: ante ello, deberás demostrarles tu valía con la actitud y el trabajo diario.
Pasar de becario a empleado no es tarea fácil pues es el anhelo de la mayoría de los jóvenes y los puestos de trabajo escasean. Pero siguiendo estos consejos y demostrando capacidad de aprender, talento y esfuerzo tus posibilidades se multiplicarán.