¿Sabías que tu Curriculum Vitae, como ocurre con un libro o con una película, puede tener su propio título? Con ello, estarás construyendo un currículum personalizado y perfectamente identificable. Además, el título le servirá al reclutador para hacerse una idea aproximada de cómo es tu perfil profesional, si es que optas por un título descriptivo. Tienes muchas más opciones a la hora de escribir el título de tu currículum; solo tendrás que escoger la que mejor te defina de entre todas ellas.
¿Qué se pone en el título de un currículum?
En primer lugar, te contamos cuáles tendrán que ser las características básicas del título, para que este cumpla su función y sea realmente efectivo. Estas son:
1. La concisión
De la misma forma que ocurre con, por ejemplo, los titulares de las noticias, el título de tu currículum deberá contener como mucho unas 10 palabras. Así, no podrás alargarte demasiado ni incluir muchos verbos u otros elementos. Siempre puedes aplicar nuestros trucos para resumir tu currículum en una única página en el título de tu CV.
2. La precisión
Si con tu titular logras que quien lo lea se haga una idea de cuál es tu profesión, experiencia o especialidad, habrás cumplido con el objetivo. No te andes por las ramas y cuenta directamente lo que quieres contar.
3. La pertinencia
Como prácticamente cualquier otro apartado de tu currículum, el título también debería adaptarse en función de cada oferta de trabajo y de lo que la empresa espera de los candidatos. En este sentido, una buena idea es inspirarte en el título de la propia oferta de trabajo en la que te has fijado.
Ten en cuenta que el objetivo de crear un buen título para tu currículum es triple. Con él, queremos dar a entender que estamos lo suficientemente preparados como para desempeñar una determinada actividad, que disponemos de una habilidad especial o que acumulamos una determinada y valiosa experiencia en el sector. En base a ello, deberemos escoger nuestro propio título para el currículum.
Ejemplos de títulos para tu currículum
En este sentido, una de las técnicas que mejor funcionan es la de incluir en el título del currículum los años de experiencia. Así, algunos ejemplos podrían ser:
«Periodista digital con 15 años de experiencia»
«Experiencia de 20 años en gestión de equipos»
Y ¿qué ocurre si la experiencia profesional acumulada no es suficiente como para poder presumir de ella? Pues bien, la mejor opción en este caso sería destacar alguna cualidad personal. Por ejemplo:
«Diseñador gráfico creativo y con iniciativa»
«Camarero muy trabajador y organizado»
¿Un truco? Leer con atención la oferta de empleo que te interese y buscar en su contenido cuáles son las habilidades que se requieren para el puesto de trabajo. Si las habilidades demandadas coinciden con las tuyas, no dudes en incluir alguna de ellas en el título de tu currículum. Tomando de nuevo los ejemplos anteriores, algunas posibles habilidades serían:
«Camarero con experiencia en pubs y discotecas»
«Diseñador gráfico especialista en animación 3D»
Se podría decir que un buen título de currículum tendría la siguiente estructura: «quién eres» + «en qué destacas». Así, estos pueden ser otros ejemplos válidos:
«Informático con conocimientos en C++ y administración LAN»
«Comercial con 9 años de experiencia para grandes marcas»
Un consejo adicional es el de incluir en el título del currículum alguna o varias palabras clave que sean valiosas en el sector o para la empresa en particular. Deberás investigar un poco y descubrir cuáles son esas palabras clave estrella, para luego incluirlas en tu título si coinciden con tu perfil.
Y ¿qué es lo que nunca se debería hacer a la hora de redactar un título para un currículum? Podríamos decir que lo más importante es no mentir, ni siquiera ser ambiguo o llevar a engaño. Esto tiene especial importancia en el caso de que te fijes en las ofertas de trabajo para crear tu título. Recuerda que no todo vale.