Los bloqueos mentales son más frecuentes de lo que puede parecer y, en muchas ocasiones, son varios los factores que intervienen. Nuestras circunstancias personales pueden hacer que seamos más vulnerables a la presión o a la tensión en el trabajo, del mismo modo que también pueden influirnos factores externos. Por ejemplo, un mal ambiente de trabajo o unos jefes demasiado exigentes o con un carácter complicado. Pero, igual de importante que conocer las causas o el origen del bloqueo, es saber cómo solventarlo de la forma más rápida posible, para que no afecte demasiado a tu rendimiento laboral. Todas las claves para superar un bloqueo mental en tu trabajo, a continuación.
«Me bloqueo en el trabajo. ¿Qué puedo hacer?»
Sufrir un bloqueo en el trabajo consiste, básicamente, en prestar más atención a los aspectos negativos del mismo, o a los propios miedos o preocupaciones. Por el contrario, se dejan olvidadas las fortalezas, las posibilidades y las soluciones más efectivas a los problemas que van surgiendo.
En cualquier caso, lo importante es tener en cuenta que la solución será mucho más sencilla si el origen del problema es interno, pues solo se tendrán que dar algunos pasos para comenzar a salir del bloqueo mental y liberar las emociones bloqueadas. En cambio, si el origen es externo, la solución será mucho más complicada.
Cómo combatir los bloqueos en el trabajo
Aunque cada persona suele recurrir a sus propias técnicas o trucos para lograr deshacerse del bloqueo mental que le domina, a continuación se proponen algunas pautas que se deberían tener en cuenta si se pretende solucionar el problema cuanto antes:
1. Acepta la situación
Muchas veces nos negamos a aceptar que estamos sufriendo un bloqueo mental, y esto es lo peor que podemos hacer. Si detectamos que no somos capaces de avanzar, el primer paso para combatir esta situación es aceptarla con serenidad. A partir de ahí, todo será más fácil.
2. Mejora tu organización
No son pocas las ocasiones en las que los bloqueos en el trabajo surgen por culpa de una mala organización o una escasa concreción a la hora de establecer los objetivos primordiales. Para aprender a priorizar tus tareas en el trabajo haz una lista con las prioridades más importantes y ordena el resto según su nivel de importancia.
3. Hazte esquemas o mapas
Para evitar la carga mental en el trabajo es primordial organizarse, plasmar en un papel el trabajo pendiente, su prioridad, sus particularidades y sus interrelaciones a veces ayuda a aclarar la situación y a verlo todo con perspectiva.
4. Aleja de ti los pensamientos negativos
Al sufrir un bloqueo en el trabajo es habitual autoinculparse, pero esto se debe evitar. Trata, en la medida de lo posible, de no pensar cosas negativas sobre ti ni sobre tu trabajo. Si detectas un fallo, intenta solucionarlo, pero no te fustigues.
5. Y también a las personas tóxicas
Si en tu día a día laboral te rodean personas tóxicas, que te hunden o te transmiten su ánimo pesimista, haz lo posible por aprender a tratar con gente tóxica en el trabajo y relacionarte menos con ella.
6. Recurre a tareas que te aportan algo positivo
Si lo que te ocurre es que tienes tanto trabajo que no sabes por donde empezar, lo mejor es que comiences por las tareas más gratificantes, las que te animen a continuar.
7. Busca aliados
Comparte tu bloqueo con tu jefe, con algún compañero o en casa. No hay nada peor que afrontar las problemas en solitario.
8. Realiza ejercicios de respiración y analiza tus rutinas diarias
Cuerpo y mente están unidos, así que quizá la solución para tu mente esté en mejorar el estado de tu cuerpo. Meditar en tus ratos libres, realizar estiramientos, controlar la alimentación e incluso acercarte a la naturaleza pueden ser las claves que te ayuden a salir del bloqueo en el que estás inmerso.