Después de pasar largas horas preparando tu Curriculum Vitae y dedicando un tiempo importante a mejorar tu presentación laboral, es posible que te encuentres ante un panorama supuestamente «desolador» cuando envías tu currículum y la empresa no responde. Llegados a este punto es posible que te plantees: ¿Esto solo me sucede a mí? ¿Mi currículum no da la talla? Sin embargo, si nos ponemos en el lugar del reclutador y realizamos un ejercicio de empatía, nos daremos cuenta de que la situación no siempre es tan sencilla como parece. A continuación te contamos qué puedes hacer después de enviar tu currículum a una empresa. ¿Preparado/a?
¿Qué hacer después de enviar tu currículum a una oferta de trabajo?
En primer lugar, hay que tener en cuenta que debido a la crisis actual, los procesos de selección experimentan una saturación considerable hasta el punto de que el reclutador suele verse desbordado por el gran número de candidaturas que recibe por oferta. Esto facilita el hecho de que no lleguen a abrirse (o leerse) todos los emails y gran parte de los profesionales queden excluidos del proceso de selección, sin ni siquiera tener una oportunidad para demostrar su valía.
Para evitar este problema y enviar tu Curriculum Vitae a una empresa de la mejor manera posible, es necesario cuidar hasta el último detalle de la presentación del currículum a través del email, y seguir los consejos que te proponemos a continuación.
1. Realiza un seguimiento de tu candidatura
Para aquellas ofertas en las que existe gran competencia entre los candidatos, ten en cuenta que durante la primera semana del proceso, la empresa puede llegar a recibir cientos de CV que dificultan enormemente la tarea de reclutación.
Ante esta situación, muchos profesionales que se postulan para un puesto de trabajo y han adjuntado su Curriculum Vitae en un email, han apostado por incluir sistemas automáticos de rastreo en el correo electrónico (como Streak), que perminen saber si el destinatario ha abierto el email, lo ha leído o incluso si ha pinchado en algún enlace que viniera incluido.
Esta estrategia es muy útil, para conocer al detalle si una situación de ausencia de respuesta se debe a que el reclutador ni siquiera abrió el email, o en caso contrario, el contenido del currículum no era de su interés.
2. Incluye recomendaciones en tu candidatura
La carta de recomendación y las referencias personales son recursos muy utilizados por los profesionales que desean sobresalir en un proceso de selección, aportando un valor extra en su candidatura. A través de las recomendaciones, una empresa puede estimar si el candidato merece la confianza suficiente como para confiar en él para el próximo puesto de trabajo.
Incluso si tienes un CV sin experiencia, puedes añadir tu experiencia procedente de prácticas formativas o voluntariado.
3. Personaliza el envío de tu currículum
Uno de los errores más frecuentes entre los profesionales es el hecho de no adaptar tu currículum a un puesto de trabajo, en función del tipo de oferta o sector al que se dirige la candidatura.
¿Qué sucede en estos casos? Que no hay aplicación directa entre el postulante (sus capacidades, experiencia previa, habilidades específicas, etc.) y el tipo de vacante que se oferta.
Por lo que, el reclutador no entiende en realidad la valía del candidato para el puesto de trabajo, al encontrarse ante un CV genérico que podría adaptarse a cualquier oferta, vacío y sin sentido con respecto al tipo de empresa que representa el profesional de recursos humanos. Intenta adaptar y personalizar el envío en función del sector al que dirijas tu candidatura.