La promoción interna puede ser una excelente forma de solucionar las necesidades laborales de la plantilla. También representa una gran oportunidad para progresar a nivel profesional dentro de una organización que conocemos, en la que nos sentimos cómodos. Pero no importa si buscas el ascenso a través de la promoción interna o lo solicitas motu proprio: un buen currículum es clave para lograr un ascenso. No podemos confiar en que nos den la plaza porque nos conocen, sino que tendremos que trabajar nuestra candidatura al puesto. Para eso, tendrás que habilitar tu CV destacando tus logros, describiendo las funciones que has desempeñado a lo largo de tu carrera e incluso, envinado una carta de presentación. Entérate de las otras pautas para conseguir tu ascenso en este artículo.
Prepara el currículum como si fuese para otra empresa
El primer requisito para triunfar con nuestro currículum de promoción interna es redactarlo como si los fueses a enviar a una empresa externa. Las razones para ello son varias. En primer lugar, es posible que los reclutadores no te identifiquen, por lo que no sabrán quién eres, tus méritos, etc. En segundo lugar, incluso aunque los responsables de la selección te conozcan, no conocerán todos tus logros, por lo que deberán aparecer junto a tus méritos en el CV. Por último, hay que redactar un buen currículum por una mera cuestión de imagen: hay que guardar siempre las formas.
Requisitos y experiencia en función del puesto al que optas
El hecho de solicitar el ascenso hace que tengamos ventaja a la hora de redactar el currículum. Más allá de que puedas conocer personalmente a los responsables del proceso, conocerás de primera mano los requisitos y la experiencia que se buscan. Y no solo eso, sino que jugarás con la ventaja de que parte de tu experiencia sea en la propia empresa. Por eso, tenemos que ponerlas en valor siempre según los requisitos buscados. Siempre puedes preguntar directamente qué se busca para destacar ese punto en tu CV y hacerlo más eficaz.
Esto mismo se aplica a la hora de redactar la experiencia. Describir las funciones que hemos desarrollado relacionadas con el puesto es clave, tanto en la propia empresa como en otras compañías -de ahí la importancia de redactarlo pensando en una empresa cualquiera, no la tuya-. Si has liderado proyectos o equipos, si estás acostumbrado a trabajar bajo presión o con equipos de trabajo deslocalizados… Todo ello puede jugar a nuestro favor, pero hay que reflejarlo en el currículum.
La progresión profesional
Una de las razones que te pueden llevar al ascenso es hacer patente tu evolución profesional. No la podemos omitir en el currículum, sobre todo si ya hemos disfrutado de alguna promoción o ascenso previo en la organización donde quieres ascender. Si la organización ha confiado en ti para darte nuevas responsabilidades y has cumplido las expectativas, será más fácil que vuelvan a confiar en ti para un nuevo ascenso. Pero si has disfrutado de ascensos en otras empresas, también dejas claras tu evolución y tu valía profesional.
Dejar claras las intenciones: quieres el ascenso
El currículum es importante para conseguir el ascenso, pero no el único recurso que tenemos. Uno de los más interesantes de los que disponemos es la carta de presentación, donde nos podemos explayar con las razones por las que queremos ese ascenso. Explica el interés por el puesto y qué te hace el candidato ideal. Si no adjuntas la carta de presentación, introduce un apartado de perfil profesional donde dejes claras tus intenciones.
Además, puedes acompañar tu currículum para lograr un ascenso con un trabajo de networking ante los responsables de la selección. Una actitud positiva y constructiva te ayudará a ganar reputación entre los responsables de ascenderte. El trabajo bien hecho, la participación en las reuniones o las aportaciones te ayudarán a ganar enteros. Pero también la inversión en el crecimiento personal y profesional o las conversaciones informales con jefes y superiores.