Cuidado, una nómina es mucho más que el importe que nos ingresan cada mes en el banco. Si no te fijas en detalles como los descuentos que te aplican, puedes llevarte más de una sorpresa desagradable. En este nuevo blog queremos explicarte que un cambio en la retención del IRPF es determinante, por ejemplo, en el resultado de tu declaración de la Renta.
Antes de que tengas que afrontar situaciones complicadas de última hora, te explicamos qué puedes pedirle a tu empresa respecto a tus retenciones y por qué se producen prácticas poco claras con este tema.
Las obligaciones de la empresa con la retención del IRPF
Todas las empresas tienen la obligación de aplicar la retención del IRPF en las nóminas de todos sus empleados. Este descuento es un adelanto de lo que computa en la declaración de la renta de esa persona. Por eso, una retención mal calculada supondrá que la declaración salga a pagar.
Es lógico que haya muchos trabajadores que prefieran ir pagando poco a poco a Hacienda que tener que hacer un desembolso importante de golpe.
En el lado opuesto, hay empresas que intentar camuflar un sueldo más elevado, aplicando al trabajador una retención del IRPF más baja.
¿Esto es legal? Lo cierto es que el hecho de que una empresa descuente menos retención en las nóminas de su plantilla es sancionable. Incluso, en los supuestos en los que por el volumen de ingresos, ese trabajador no esté obligado a hacer declaración de la renta.
¿Cómo calcular la retención del IRPF en la nómina?
Como decíamos, el porcentaje de retención del IRPF en una nómina permite una cierta flexibilidad. Pero es el beneficiario de esa nómina el que puede elegir, no debería ser en ningún caso la empresa. Si quieres calcular exactamente la retención que re corresponde, ten en cuenta estos datos:
- ingresos brutos anuales
- fecha de inicio y fin del contrato
- estado civil
- familiares directos a tu cargo (padres, hijos, cónyuge)
- discapacidad de algún familiar a cargo
- pago de pensiones compensatorias o por alimentos
- vigencia de préstamos de vivienda con derecho a deducciones en la renta.
Para estar más seguro de este cálculo, puedes recurrir a la propia Agencia Tributaria que dispone de un servicio de cálculo de retenciones.
Cómo pedir un aumento en la retención del IRPF a tu empresa
Una vez que tienes más clara la retención que te corresponde y sabiendo que nunca puedes pedir que se te descuente menos de ese porcentaje, lo que siempre puedes solicitar es que se te aumente el IRPF. Eso sí, con un límite. Ese incremento no puede superar en ningún caso una retención superior al tipo marginal máximo que se establece en la tabla del artículo 85 del Reglamento del IRPF. Ese tipo marginal máximo nunca podría ser mayor al 45%.
Para pedir a tu empresa que te aumente la retención del IRPF debes solicitarlo por carta. En ella debes reflejar estos datos:
- dejar expresamente escrito que pides un aumento de la retención
- el tipo marginal exacto de IRPF que quieres pagar
- la carta debe estar fechada y firmada
- tienes que rellenar el modelo 145 de la Agencia Tributaria
Recuerda que la solicitud debes entregarla 5 días antes de que acabe el mes y estará vigente de forma continuada hasta que cambien tus circunstancias o pidas otro cambio.
Situaciones en las que solicitar una subida de IRPF
Aunque hemos señalado que es un derecho, dentro de unos límites, de cualquier trabajador, existen algunos supuestos en que es especialmente recomendable pedir un aumento de IRPF. Sobre todo, es recomendable hacerlo cuando has tenido dos pagadores durante un mismo ejercicio fiscal.
Esta situación se produce si:
- has cambiado de empresa
- has estado unos meses cobrando el subsidio de desempleo
- has encontrado trabajo estando en paro