¿Qué puedo hacer para acabar con mi miedo a ser despedido?

Con el azote de la crisis, muchas empresas se ven obligadas a hacer recortes en la plantilla. Este ambiente de incertidumbre crea mucha tensión y malestar entre los empleados. Los niveles de estrés laboral que genera el miedo al despido, según los expertos, tienen consecuencias nefastas sobre la salud mental de los trabajadores. Pero cuando parece que «somos el siguiente», ¿qué podemos hacer para gestionar este temor?

El miedo a enfrentarse a un despido nos provoca una sensación de ansiedad difícil de manejar, pero no es imposible conseguirlo. Estos son algunos consejos para acabar con este miedo. Sin embargo, en caso de que nuestras preocupaciones se somaticen y nos impidan seguir con nuestra vida cotidiana de forma normal, puede ser conveniente acudir a un especialista.

1. Encuentra el origen de tus miedos

¿Desde cuándo dudas si tu jefe está contento contigo? ¿Qué señal ha despertado tus temores? Puesto que lo primero que debes hacer es plantearte de dónde viene tu miedo al despido, puedes reflexionar sobre qué diferencias hay entre tu situación actual y la que tenías hace un año, y descubrir qué ha cambiado.

2. Tus compañeros son tu apoyo

En el estudio de las enfermedades asociadas con el entorno laboral, ha quedado demostrado que los compañeros de trabajo son el mejor apoyo para los profesionales que se sienten «quemados» con su empresa. Lo más probable es que tu equipo comparta tus sensaciones y te entienda mejor que nadie.

3. Valora tus posibilidades

Muchas personas se sienten paralizadas por el miedo. Sin embargo, si creemos que nuestro puesto de trabajo pende de un hilo, una forma de canalizar nuestro temor es prepararnos para las opciones que podríamos afrontar. Por ejemplo, puedes aprovechar tu estabilidad económica actual para ahorrar de cara al futuro, o empezar a buscar un nuevo empleo. Esto te ayudará a sentir que, pase lo que pase, tienes control sobre la situación.

4. Consulta a tus jefes

En ocasiones, enfrentarnos directamente nuestras dudas puede ser muy beneficioso. Si crees que tu supervisor no está satisfecho con tu rendimiento, intenta preguntárselo. Tal vez confirme tus sospechas, ¡o tal vez las desmienta!

5. Da lo mejor de ti mismo

¿Has escuchado hablar del efecto Pigmalión? Según esta teoría, si crees que vas a ser despedido pronto, actuarás como si esto fuese a suceder, y atraerás este resultado. Por eso, es importante que sigas trabajando con naturalidad, poniendo en práctica al máximo tus habilidades y talentos.