El currículum funcional es un tipo de curriculum que distribuye la información por temas, de manera que permite proporcionar un conocimiento rápido de tu formación y experiencia en un ámbito determinado. Al no seguir un orden cronológico, el curriculum funcional permite seleccionar los puntos positivos, destacar las habilidades propias y logros conseguidos, al tiempo que se omiten o difuminan los no deseados, como los errores de recorrido, los periodos de paro o los cambios frecuentes de trabajo sin haber promocionado, entre otros. Esto es muy similar si deseas elaborar un curriculum vitae sin experiencia laboral, no dejes de echar un vistazo a los ejemplos de currículum vitae para estudiantes en caso de que no hayas trabajado nunca por encontrarte estudiando.
Si quieres redactar el curriculum y no tienes apenas experiencia que acreditar, el curriculum funcional puede ser el curriculum más conveniente. Con el modelo de curriculum funcional sin experiencia podrás destacar tus habilidades, capacidades y tu forma de trabajar, sin que sea relevante tu experiencia laboral anterior.
Estructura del curriculum funcional sin experiencia
El curriculum funcional se centra en tus capacidades y aptitudes profesionales y personales, antes que en tus circunstancias laborales. La estructura del curriculum funcional permite mucha más flexibilidad y libertad en la organización de la información de tus logros y habilidades, y además facilita la inclusión de otra información relacionada como intereses o motivaciones. ¿Quieres ser abogado? ¿Tal vez ingeniero? Sea cal sea tu caso la mejor forma de encontrar trabajo si aún no tienes experiencia es formarte profesionalmente, con las habilidades necesarias del puesto al que vas a postular. Busca el mejor master para ser ingeniero o el mejor master para ser abogado y aumenta tus posibilidades de obtener el empleo que buscas.
Los objetivos profesionales y las habilidades conseguidas son los apartados más importantes dentro de la estructura del curriculum funcional. Puedes destacar tus habilidades comunicativas, la experiencia en grupo, el trabajo en equipo, el desarrollo de la capacidad de organización y análisis, tu nivel de creatividad, así como cualquier otro tipo de competencias relevantes que puedan distinguirte del resto de candidatos y que te hayan podido aportar tus estudios y trabajos voluntarios o en prácticas que hayas realizado hasta el momento.
Otra de las partes del curriculum funcional que debes incluir es la formación académica (títulos universitarios, graduados, cursos, proyectos, etc.), así como los conocimientos técnicos e informáticos que poseas (programas de diseño, edición de textos, redes sociales, etc.). Destaca también tu nivel de idiomas. Asegúrate de diferenciar entre el nivel hablado, escrito y leído aunque no poseas una acreditación de idiomas oficial.
Te recomendamos que acompañes tu curriculum funcional de una carta de presentación en la que resaltes tus fortalezas y puntos fuertes para aumentar las posibilidades de que el reclutador contacte contigo para el siguiente paso: la entrevista de trabajo. Además, las empresas valorarán muy positivamente si añades a tu curriculum sin experiencia un breve apartado en el que expliques cuáles son tus aficiones e intereses (lectura, fotografía, teatro, etc.).